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Desde el 1 de marzo, los hogares españoles experimentan un aumento normativo al 21% en el IVA aplicado a sus facturas de electricidad. Esta medida impacta en cualquier factura que incluya algún día del mes de marzo, independientemente de si abarca períodos anteriores.
En respuesta al conflicto en Ucrania, el Gobierno implementó una serie de medidas temporales para contrarrestar los efectos en el sector energético y en los consumidores. Una de estas medidas fue la reducción temporal del IVA de la electricidad, que pasó del 21% al 10% en junio de 2021 y luego al 5% en julio de 2022.
Sin embargo, estas reducciones fueron revertidas en enero de 2024 según lo estipulado en el Real Decreto-ley 8/2023. En este caso, el IVA aumentó al 10%, efectivo hasta el 31 de diciembre del mismo año, para luego regresar al 21% el 1 de enero de 2025.
Este cambio normativo estaba condicionado por varios criterios específicos: primero, se aplicaba solo para potencias contratadas de hasta 10 kW; segundo, el precio de mercado de la electricidad del mes debía estar por encima de los 45€/MWh.
Desde que empezaron a adoptarse estas medidas, el precio medio mensual del mercado se había mantenido por encima de la cifra mencionada anteriormente.
En febrero, la generación de energía renovable alcanzó altos niveles gracias a los fuertes vientos, lo que resultó en una disminución en el precio de mercado de la luz, siendo inferior a los 45 euros estipulados. Como consecuencia, las facturas de luz cuyo período de facturación finalice en marzo se ven afectadas, aumentando el IVA de la factura al 21%.
Los consumidores con tarifas indexadas (variables) podrían beneficiarse de la reducción del precio del mercado, mitigando el impacto del aumento del impuesto. Sin embargo, aquellos con tarifas fijas verán un incremento directo en sus facturas, ya que no se ven afectados por las fluctuaciones de mercado.
Aunque la disminución del precio de mercado podría parecer un alivio, el aumento del IVA al 21% contrarresta este beneficio. Según la OCU, esto podría significar un aumento anual de alrededor de 62 euros en la factura de un hogar medio.
Sin embargo, el tipo de IVA aplicado puede cambiar nuevamente durante el resto del año 2024, dependiendo de la evolución del precio de la electricidad. Si supera los 45 euros por MWh, se volverá a aplicar el IVA reducido del 10%.
Por otro lado, el Impuesto Especial Sobre la Electricidad, mantenido hasta ahora en tipos reducidos, aumentará al 3,8% de abril a junio y luego volverá al 5,11%. En consecuencia, independientemente de los posibles cambios en el tipo de IVA, se podrá apreciar un ligero incremento en la factura respecto a meses anteriores debido a este impuesto.
En EnergyPlus, estamos comprometidos a apoyar a nuestros clientes durante este periodo de transición impositiva, proporcionando asistencia, información y soluciones adaptadas a sus necesidades energéticas. Estamos disponibles para responder cualquier pregunta o inquietud que puedan surgir.